Voceros de la Unión Europea consultados por Clarín se desentendieron del febril conflicto diplomático entre Argentina y España y a su vez lo consideraron «bilateral».
De hecho, desde Bruselas, el portavoz de Exteriores de la Comisión Europea, Peter Stano declaró a la prensa que lo consultó: «Esperamos que los dos países, España y Argentina encuentren una solución para solucionar su disputa bilateral».
La inquietud surge del tuit que el domingo a la noche puso en su cuenta el Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, quien el domingo avaló al gobierno de Pedro Sánchez con un mensaje que decía «La libertad política, la prosperidad, la cohesión social basada en la redistribución fiscal y el respeto en el debate público son pilares de la UE. Los ataques contra familiares de líderes políticos no tienen cabida en nuestra cultura: los condenamos y rechazamos, especialmente cuando provienen de socios».
Ese texto avalaba al gobierno del PSOE porque iba acompañado con un retuit al canciller José Manuel Albares que el domingo anunció la convocatoria a Madrid de la embajadora María Jesús Alonso -que ahora se queda allí al escalar la crisis. Borrell es ex canciller, de origen socialista, y con ciudadanía argentino española.
Un caso claro que tuvo lugar en la política comunitaria -y que llevó al Parlamento Europeo a votar medidas contra la Argentina- fue el de la expropiación de YPF a Repsol en 2012 bajo el gobierno de Cristina Kirchner. Pero ella afectaba intereses europeos. Y la pelea Sánchez-Milei, que es política, incluso explota por asuntos privados
La última crisis estalló luego de que Milei llamara «corrupta» a Begoña Gómez, la mujer de Pedro Sánchez. Y lo dijo en pleno acto de apoyo al líder de la ultraderecha española, Santiago Abascal que con Vox, compite contra el PSOE y el PP en las elecciones parlamentarias europeas del próximo 9 de junio. Esos comicios de la UE son el contexto para que las fuerzas en España estén extrema tensión utilizando la popularidad de Milei, en un sentido un otro.
La situación es más que incómoda para los que están en el centro, como el Partido Popular, que al igual que le pasó al PRO en Argentina observa la pelea entre los extremos y puede perder en ella. Critica a Sánchez y al socialismo, apoyó a Milei, pero no contiene la agresividad del argentino ni tampoco atenta contra lo institucional.
Consultada por Clarín, la embajada de la Unión Europea que conduce el embajador Amador Sánchez Rico, no hizo comentarios. Por el contrario, la opinión la dejó plasmada Borrel con su tuit del domingo.
Pero para que no haya confusiones, en Bruselas, el portavoz del ejecutivo de la comunidad europea Eric Mamer dijo que la UE se quiere centrar «en las cuestiones de fondo» en su relación con Argentina, al margen de la crisis diplomática con España.
Entre tanto, Stano recordó el mensaje de Borrel del domingo destacando que «los ataques contra familiares políticos no tienen cabida» en la cultura europea, por lo que condenó las palabras de Milei.
Otras fuentes consultadas por Clarín destacaron que en este momento incómodo y mientras el socialismo pese en la comunidad europea, también resultará de dificil debate los pedidos argentinos para ser «socio global» de la OTAN e incluso miembro de la Organización para la Cooperación para el Desarrollo Económico (la OCDE). No es que de ninguna manera exista riesgo de rechazo, pero sí se o empieza a ver como «conflictivo».