Luego que la expresidenta Cristina Kirchner se metiera en la polémica por la retención de alimentos en el Ministerio de Capital Humano y tildara a Sandra Pettovello de «funcionaria que no funciona», el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, salió con los tapones de punta.
«Gobernaron 16 de los últimos 20 años. Dejaron el país hecho pelota. No quedó NADA POR DESTRUIR», lanzó Menem a través de sus redes sociales.
El descargo del libertario llegó casi 24 horas después de que Cristina Kirchner cuestionara al Gobierno a través de su cuenta de Twitter. Allí, la exvicepresidenta puso el foco en tres asuntos: el escándalo por la retención de alimentos destinados a comedores, que eyectó a funcionarios de Capital Humano, entre ellos Pablo De la Torre; la crisis por la falta de gas; y el plan económico de Milei.
«Ud tuvo ejércitos de funcionarios ineptos que FUNCIONABAN a ‘sobreprecio’, ‘facturas truchas’, ‘obras fantasma’, ‘privilegios’, etc etc», arremetió Menem.
Gobernaron 16 de los últimos 20 años.
Dejaron el país hecho pelota.
No quedó NADA POR DESTRUIR.Ud tuvo ejercitos de funcionarios ineptos que FUNCIONABAN a «sobreprecio», «facturas truchas», «obras fantasma», «privilegios», etc etc
Mientras sus funcionarios «funcionaban» de…
— Martin Menem (@MenemMartin) June 1, 2024
En ese marco, el libertario continuó: «Mientras sus funcionarios «funcionaban» de esa manera, el país se EMPOBRECÍA aceleradamente, llegando al punto de que casi 7 de cada 10 menores de edad tiene problemas de alimentación».
Y remató: «¿No le da VERGÜENZA? Digo, ¿no será momento de dar un paso al costado para siempre?».
A través de un duro y extenso mensaje en las redes, Cristina Kirchner le aplicó a Pettovello la etiqueta que, durante el gobierno del Frente de Todos, utilizó para descalificar a Matías Kulfas y Martín Guzmán, entre otros integrantes albertistas del gabinete anterior. «Comprobación empírica de ideas que no funcionan y funcionarios que tampoco funcionan. Sus consecuencias prácticas, económicas y humanas», lanzó.
También aludió a la crisis del gas como «consecuencias económicas de ideas que no funcionan (superávit o muerte… aunque sea trucho)» y arremetió: «Consecuencias humanas de funcionarios que no funcionan (porque no saben, no entienden, no firman por miedo, no les importa, o lo que es peor… todo junto)».
«Si este gobierno hubiese continuado con el ritmo y el calendario previsto para las obras de las plantas compresoras del gasoducto Néstor Kirchner en las localidades de Tratayen y Salliqueló, Argentina, entre los meses de mayo y agosto, hubiera importado casi 18 barcos menos de GNL y ahorrado la bonita suma de 450 millones de dólares. Además, ninguna fábrica hubiera parado su producción y ningún argentino suspendido su trabajo por falta de GNC para su auto», cuestionó.
Luego se detuvo en la polémica por la no distribución de alimentos a comedores y habló de «mentiras y negativas públicas» del Gobierno sobre las denuncias.
«La existencia de casi 6 mil toneladas de alimentos sin repartir, en los que hay casi 1 millón de kg de leche en polvo (equivalentes a casi 10 millones de litros), de los cuales casi 400.000 kg vencen en el mes de julio. Comedores comunitarios que por no recibir asistencia del Ministerio de Capital Humano, tuvieron que dejar sin comida a las familias que asistían. Pibes y pibas que no tomaron un vaso de leche cuando correspondía. Mientras tanto la comida se pudre en los depósitos«, sentenció.
Y dejó una posdata, con apoyo tácito al referente social Juan Grabois, que motorizó la denuncia. «Si nadie hubiera reclamado o denunciado nada… ¿Qué hubiera pasado con esa comida?», se preguntó.
El fuerte mensaje de Cristina llegó un día después de que Capital Humano reconociera, tras negarlo durante días, la existencia de alimentos próximos a vencerse. Además, desde el ministerio que lidera Pettovello limitaron las competencias de funcionarios involucrados y ordenaron al Ejército comenzar con la distribución de mercadería.