Los gremios de los empleados legislativos acordaron este jueves un nuevo aumento paritario acumulativo de 6,13% y se abrió el interrogante de cómo impactará esta suba en las dietas de los diputados y senadores que venían siendo ajustadas por la denominada «ley de enganche».
Antes de que se firmará la resolución entre los gremios y los representantes de las dos cámaras del Congreso, los senadores salieron rápido a aclarar que está vigente el congelamiento de las dietas hasta el 31 de diciembre. Aunque nadie se arriesgó a confirmar que cumplido ese plazo no habrá otro fuerte incremento en los sueldos de los legisladores.
La situación en la Cámara alta es compleja porque los senadores aprobaron en abril de este año, a mano alzada y sin debate, un novedoso sistema de actualización de las dietas que llevó los sueldos a $ 7,2 millones bruto, cuando venían cobrando desde 2023 un neto de $ 1,9 millón. Esto significó un aumento de 400 % en el sueldo de los legisladores, en un momento que el resto de los trabajadores eran blanco de un fuerte ajuste dispuesto por el Gobierno.
El mecanismo que se aprobó en el Senado establecía que el sueldo de los legisladores quedaba en 2.500 módulos, que es el sistema utilizado para definir los sueldos de los empleados del Congreso. Pero a ese importe hay que sumarle 1.000 módulos extra por gastos de representación y otros 500 por desarraigo. Si se aplicara el sistema, las dietas llegarían a $ 8,8 millones a partir del 1° de noviembre, ya que el valor del módulo quedó en $ 2.203.
Por ahora, los senadores renunciaron a aplicar esta actualización, por lo menos, hasta el 31 de diciembre, según lo aprobado en en agosto pasado cuando ante el anterior acuerdo paritario, las dietas de los legisladores se había disparado a los $ 9 millones. Esto provocó una fuerte reacción en la opinión pública y del propio Javier Milei, quien acusó en ese momento a los senadores de “traición a la Patria” obligando a los legisladores a retroceder con la medida.
En tanto, desde la oficina de Martín Menem confirmaron que no habrá ley de enganche en la Cámara baja, pese a que sus dietas quedaron retrasadas respecto de los senadores. En la actualidad, los sueldos de los diputados se ubican en $ 3.497.958 a lo que se suma $ 625 mil en concepto de desarraigo.
Los legislativos reciben un aumento por debajo de la inflación
Las cámaras acordaron con los gremios un refuerzo salarial escalonado en cuatro cuotas que serán otorgadas entre septiembre y diciembre, que será menor a la inflación acumulada en septiembre y octubre.
El acuerdo prevé un aumento de 2% retroactivo a septiembre y 1% a octubre. Mientras que para este mes también se fijó una suba de 2% y 1% diciembre. Al ser acumulativo, el aumento llegará al 6,13 %.
El convenio alcanzado es por el último cuatrimestre del año y se acordó que este año no se pagará el bono extra para los trabajadores.
El acta paritaria fue rubricada en representación de Diputados por los secretarios general, Diego Molina Gómez; y administrativa, Laura Oriolo; mientras que por el Senado lo hicieron los secretarios parlamentario, Agustín Giustinian; y administrativa, María Laura Izzo.
En representación de los empleados legislativos estuvieron Norberto Di Próspero por la Asociación del Personal Legislativo (APL); Claudio Britos. por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y Esteban Makaric, por la Unión de Personal de la Nación (UPCN).