En el corazón de la provincia de Córdoba, entre las localidades de Elena y Gigena, del departamento Río Cuarto, se alza una construcción que susurra historias del pasado: la capilla de Tegua.
Este pequeño templo, bajo la advocación de Nuestra Señora del Rosario, data de finales del siglo XVII y ha sido testigo del paso del tiempo y de la transformación de la región.
Su origen se remonta a la época colonial, cuando el alférez Miguel Fernández Montiel estableció una estancia en la zona.
La capilla original, una humilde estructura de adobe, fue construida junto a la vivienda familiar. Sin embargo, en el siglo XVIII, su hijo, el capitán Ignacio Arias Montiel, decidió reemplazarla por una nueva capilla de piedra, la cual, con modificaciones a lo largo de los años, es la que se puede admirar en la actualidad.
La capilla presenta elementos arquitectónicos típicos de la época colonial, como un coro alto al que se accede por una escalera exterior y una espadaña con tres huecos para las campanas.
A principios del siglo XX, se añadió un nártex de cuatro arcadas, que contrasta con los muros originales de piedra. Este añadido, junto con el retablo actual, fue donado por Dolores Buteler de la Torre, cuyos restos descansan en el interior del templo.
Tras décadas de abandono, la capilla de Tegua, junto con su atrio y cementerio, fue restaurada gracias a la iniciativa de los municipios de Elena y Gigena. El proyecto, llevado a cabo por la Secretaría de Arquitectura de la Provincia y la Agencia Córdoba Turismo, contó con la supervisión de la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Sitios Históricos.
Ubicación de la capilla de Tegua
- Provincia. Córdoba
- Dirección. Ruta Nacional Nº 36. Pedanía Tegua, entre las localidades de Elena y Alcira Gigena.