Una monja brasileña de 116 años es la nueva persona más anciana del mundo. Inah Canabarro Lucas vive en Porto Alegre, en un convento católico de la Congregación de las Hermanas Teresianas de Brasil.
Esta novedad fue confirmada tras la muerte de Tomiko Itooka, una japonesa que había nacido el 23 de mayo de 1908 en la ciudad de Osaka. Falleció este sábado por causas naturales, a los 116 años.
Inah nació el 8 de junio de 1908 en San Francisco de Assis, Rio Grande do Sul, y comenzó su camino religioso a los 16 años.
Uno de los sobrinos de la anciana contó a los medios de Brasil que su tía monja se realiza chequeos médicos de rutina y que el secreto para la longevidad es «el buen humor, el optimismo, la bondad y la espiritualidad».