La nueva edición de la exposición ArtFutura, que se desarrolla en el Palacio Neptuno de Madrid, transmite un mensaje claro: la Inteligencia Artificial Generativa no es una amenaza para el arte, sino una nueva herramienta que expande los límites de nuestra creatividad. Sin miedo.
“El futuro llega temprano, el futuro ya está aquí, pero está mal repartido”, es lo que dijo en los años 90 el escritor de ciencia ficción pionero del Cyberpunk William Gibson en el pionero festival español ArtFutura.
El Futuro se Adelanta. Este es el título de la exposición inmersiva de arte de inteligencia artificial (IA Art) que ArtFutura lleva programando desde hace más de un mes en el Palacio Neptuno de Madrid: 45 minutos de inmersión para acercarnos la creatividad asistida por inteligencia artificial en el mundo de arte más reconocido.
Lo que nos viene a sugerir la exposición es que pongamos nuestra atención a la creatividad relacionada con la utilización de la inteligencia artificial generativa en el arte y en todos los campos. La exposición El Futuro se Adelanta nos muestra el presente y futuro a través de la mirada de estos artistas digitales, nos asoman a crono ventanas de futuro presente, a nuestra nueva realidad. Este doble planteamiento nos dirige a la reflexión sobre la próxima revolución de nuestro tiempo.
Nueva explosión de creatividad
La gran revolución que hemos vivido los últimos 30 años ha sido Internet, pero Internet no es solo una red de ordenadores, es una red de personas ya decíamos en los 90: la potencial conexión de todos los seres humanos alrededor de la Tierra, un espejo digital gigante en el que mirarnos. La nueva revolución humana será el Internet inteligente, la convergencia con la IA y cómo esto afectará a nuestra conexión y modo de comunicarnos como seres humanos, y bajo qué nuevas formas nos vamos a poder ver reflejados nosotros mismos.
Sobre el impacto de la creatividad de la IA en el arte pero también en la sociedad, en la vida cotidiana, en la comunicación, en la ciencia, tenemos muchos ejemplos en los que podemos ver que la inteligencia artificial generativa nos está llevando a ser más creativos, por ejemplo de la ciencia, en el descubrimiento y elaboración de proteínas y nuevos cristales, nuevos materiales, en simular fenómenos físicos, con propiedades diferentes, nuevas hipótesis, un modo de abordar investigaciones de manera creativa, diferente.
Esta interrelación entre el arte, la ciencia y la tecnología, señala de alguna manera un camino hacia una nueva explosión de creatividad, hacia aumentar la creatividad en todos los ámbitos humanos. Pero hay que saber hacer las indicaciones correctas, partir del pensamiento crítico y creativo humano, buscar la respuesta más improbable, no la más probable.
Democratizar la creatividad
Sobre esto advierten artistas tan conocidos como los británicos Brian Eno – invitado por ArtFutura en varias ediciones- y Stephen Fry o la artista española Gema FB Martín, psicóloga, y doctora especializada en personalidad y emociones artificiales en la interacción humano-máquina. Después de la ver la exposición, Gema añadía “la ficción sueña para que la ciencia pueda demostrarlo y la tecnología construirlo”. El experto en tecnología y sostenibilidad, colaborador de Tendencias21, Jimmy Pons nos dijo que “la imprenta democratizó el conocimiento, Internet la información, las redes sociales la comunicación y la Inteligencia artificial ha venido a democratizar la creatividad”.
Esto es lo que sería en referencia a la inteligencia artificial generativa. Luego, ya, si nos pasamos a reflexionar sobre la inteligencia artificial general a más largo plazo, desde Sam Altman fundador de Open AI, desde el padre de la IA y las redes neuronales Geoffrey Hinton, o como advirtió al respecto el mismísimo Stephen Hawking, en un primer hito alcanzaríamos la IA General (IAG) de aquí a 2030 y en segundo hito, antes de 2050, ya estaríamos hablando de superinteligencia y de singularidad, una superinteligencia que superará a toda la inteligencia colectiva de la humanidad.
Encontramos pronósticos muy diferentes entre estos expertos, o muy optimistas o directamente pesimistas. Podemos considerar que la IAG sería -como mínimo- esa inteligencia artificial que realmente pudiera llevar a cabo los procesos mentales que tenemos los seres humanos, los reproduzca y consiga resultados iguales o mejores en casi todos los campos del conocimiento y la productividad.
Creatividad expandida
¿También de la creatividad? De momento se puede afirmar que ‘»la IA generativa no es una amenaza para el arte, sino una nueva herramienta que expande los límites de nuestra creatividad», según nos transmite el artista Akira Tanaka en la exposición de ArtFutura. «El arte y la inteligencia artificial son dos campos fascinantes que cada vez están más conectados, esta combinación nos permite explorar nuevas fronteras creativas y cuestionar nuestra propia decisión de lo que es arte» según expresa el artista, comisario y fundador de ArtFutura Montxo Algora.
Otro de los asistentes a la exposición Paulino Cuevas Coordinador general de la Spain Film Commission indicó que “la irrupción IA Generativa en 2024 ha sido revolucionaria y en 2025 será imparable. Mi opinión es que el audiovisual debe afrontar y adoptar esta revolución con la resiliencia característica de la industria. Sin miedo. Como en otras ocasiones, la industria del entretenimiento siempre ha sido pionera en la adopción de las tecnologías innovadoras: el tránsito del cine mudo al sonoro; la llegada de Photoshop al mundo de la fotografía; la creación de los sintetizadores en la industria de la música en los ochenta o el paso del analógico a lo digital en la industria de la música, por citar algunos. La realidad es que la IA está transformando el audiovisual en todos los campos del proceso de producción como la creación de storyboards, guiones sintéticos, análisis de guion, edición, postproducción, VFX, predicción de éxitos en taquilla o los cada día más importantes resultados a nivel generación de imágenes, según pudimos comprobar en ArtFutura este enero de 2025”.
Futuro utópico
Los artistas nos abren a esas dos décadas que vienen. Se puede ver en la exposición que los artistas digitales de IA Art nos ayudan a visualizar lo que viene también, el futuro: vemos que en todos los futuros sentimos la IA, está ahí, estética informativa artificial: como un espejo de nosotros mismos, pero en futuro presente. El arte tiene esa potencia de revelar como el mundo se amplía, de revelarlo. El arte tecnológico desvela el futuro, utópico y distópico a la vez.
Brian Eno, uno de los grandes artistas invitados en estas décadas del festival ArtFutura nos deja esta pregunta: “si la IA va abarcando muchas actividades humanas, si los humanos delegamos la creación de conocimiento en la IA y todas las tareas humanas que puedan automatizarse, ¿qué nos quedará a los humanos?”