Recién llegada de Turquía, Wanda Nara habló con la prensa en el aeropuerto de Ezeiza antes de dirigirse a la clínica donde L-Gante sería intervenido quirúrgicamente por una lesión en la clavícula. En sus declaraciones, la conductora expresó su preocupación por el impacto que el conflicto con Mauro Icardi está teniendo en sus hijos.
“Me parece que todo tiene un límite. Y ese es mi límite, mis hijos. Nunca voy a desestimar lo que expresa un menor. Hasta el 19 (de febrero) siempre tuve buena voluntad porque desconocía la gravedad del informe escolar que se difundió en las últimas horas”, aseguró la empresaria, haciendo referencia a un documento académico de uno de sus hijos que tomó estado público.
Nara confirmó que inició acciones legales contra Icardi en relación con este conflicto, pero aclaró que no lo hizo en conjunto con su exesposo Maxi López. “En conjunto con Maxi no, él presentó su denuncia y yo la mía”, señaló.
En cuanto a su reciente viaje a Turquía, explicó los motivos detrás de su decisión de viajar en un momento complicado para su familia: “Fui por un reconocimiento. Para mí fue un honor enorme. Me invitaron con los pasajes, el hotel. Además, cobré un dinero por una publicidad”.
Sobre la difícil situación que enfrentan sus hijos, Wanda fue contundente: “Mis hijos están atravesando un momento muy complicado. Mis varones están con la familia paterna. Los abogados están trabajando en el caso. Yo hice todo lo que estaba a mi alcance. Mis hijos tienen miedo de que Mauro cumpla con su amenaza y los lleve a vivir a Turquía. Lo verán cuando haya garantías de que eso no sucederá”.
Por último, la conductora expresó su frustración con el sistema judicial y la percepción pública sobre su rol como madre: “Siempre acaté lo que dictaminó la Justicia. Me estoy haciendo cargo sola de mis hijos porque los tiempos judiciales son lentos y porque tengo la posibilidad de hacerlo. Aun así, sigo siendo juzgada”, concluyó.
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