Cambios en ARCA: los puntos a tener en cuenta para conservar el monotributo
El nuevo esquema de monotributo implementado por la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) ya está vigente e incorpora obligaciones digitales que requieren mayor atención por parte de los contribuyentes. La medida busca modernizar el régimen simplificado y establece un nuevo calendario de recategorización semestral.
Lo que se debe tener en cuenta sobre el nuevo monotributo de ARCA
El nuevo monotributo de ARCA ya está en vigencia e incorpora cambios importantes que impactan directamente en la rutina de los contribuyentes. Uno de los principales es la incorporación obligatoria del remito digital para el traslado de muebles o mercadería, reemplazando de manera definitiva a los antiguos formularios en papel. Desde ahora, toda esta gestión debe realizarse por vía electrónica, con el objetivo de mejorar la trazabilidad, facilitar el cruce de datos con las facturas y detectar posibles operaciones no declaradas, promoviendo así una mayor transparencia fiscal.
Por otro lado, el régimen pone el foco en dos fechas fundamentales: febrero y agosto, momentos en los que se debe revisar la categoría del monotributo y realizar la recategorización si corresponde. Estas actualizaciones no solo responden a un mayor control fiscal, sino que también permiten optimizar procesos, evitar errores comunes y prevenir sanciones. Adaptarse cuanto antes a esta nueva dinámica resulta clave para mantener una gestión ordenada, cumplir con las obligaciones y seguir operando con normalidad dentro del régimen simplificado.
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Las categorías del monotributo en junio 2025
Desde junio, los valores del monotributo se actualizaron y varían según la categoría en la que se encuentre cada contribuyente y el tipo de actividad que desarrolle. Por ejemplo, quienes están inscriptos en la Categoría A deben abonar $32.221,31, mientras que en la Categoría B el monto mensual asciende a $36.679. En la Categoría C, quienes prestan servicios pagan $42.951,25 y quienes venden productos, $41.982,19. Estos montos incluyen tanto el impuesto mensual como los aportes previsionales y de obra social.
A medida que se asciende en las categorías, los importes aumentan de forma considerable. Un profesional encuadrado en la Categoría K debe pagar $1.050.323,75, mientras que un comerciante en la misma categoría abona $456.773,20. Estas cifras evidencian cómo el monto del monotributo mensual crece en función del nivel de facturación, lo que resalta la importancia de llevar adelante una planificación financiera adecuada para evitar complicaciones.
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