El presidente andaluz, Juanma Moreno, ha defendido este jueves la gestión sanitaria de su Gobierno, de cuyo debate sobre sus problemas ha dicho que nunca «ha huido», pero ha advertido de que cuando llegó a la Presidencia de la Junta se encontró una «sanidad destruida» por la etapa de los gobiernos socialistas.
El Parlamento andaluz ha acogido una sesión de control al Gobierno andaluz acalorada, en la que los grupos de la oposición y el presidente de la Junta se han acusado mutuamente de mentir sobre la crisis de los cribados del cáncer de mama, que de nuevo ha estado presente en todas las intervenciones de los grupos.
Moreno, aprovechando la pregunta del portavoz del PP, Toni Martín, anunció una inversión «potentísima» en los presupuestos de 2026 en materia de servicios sociales, de educación, y sobre todo en sanidad, a la que está previsto destinar más de 16.000 millones de euros. «Nunca he huido de los debates en Sanidad, nunca he dicho que no hubiera problemas, y hemos puesto muchos elementos para paliar los que venían del pasado», señaló Moreno, quien ha evocado que la época de mayor crisis económica sufrida por España coincidiendo con el Gobierno de Zapatero «tuvo su eco» en materia sanitaria andaluza de la mano de la actual vicepresidenta y secretaria general del PSOE-A, María Jesús Montero.
Según el presidente andaluz, de la mano de Montero «se llevaron a cabo los mayores recortes en Andalucía», ya que se dedicaron mil millones menos para sanidad y se despidió a 7.000 profesionales, al tiempo que se realizó el mayor número de conciertos con la sanidad privada. «Venimos de una sanidad destruida», subrayó Moreno, quien dijo que Montero «trataba con la punta del pie» a los sanitarios, y muchos de ellos, que aún están en activo «no lo han olvidado».
Especialmente duro con el presidente andaluz se mostró el portavoz de Vox, Manuel Gavira, quien dijo en su intervención que lo que ha ocurrido con el cribado del cáncer de mama «no es bache coyuntural sino un problema estructural, con un origen político, que iniciaron los socialistas y ustedes se han dedicado a mantener». Se ha mostrado seguro de que el Gobierno no habría realizado tantos anuncios de planes y apuestas por el sistema de salud si no hubiera ocurrido este caso, porque, en su opinión, lo que le importa a Moreno «no es la salud sino los votos», y lo que se percibe es «una pinza entre el PP y el PSOE que estruja a las mujeres» enfermas. «Es vergonzoso que un presidente no sepa lo que pasa. Nos acusa de que una cosa es prometer y otra gobernar cuando eso es lo que hacia usted. Además de mentir», ha subrayado Gavira.
Por su parte, Toni Martín, arremetió contra los grupos de la oposición, de los que ha dicho que están «perfectamente coordinados» para atacar y erosionar al Gobierno, y ha añadido que en esta estrategia «miserable» estos partidos no han dudado incluso en «poner sus sucias manos» sobre el movimiento asociativo. «Aparten sus sucias manos de las asociaciones de las mujeres con cáncer», advirtió Martín, quien ha añadido que desde estos grupos se pretende «teledirigir a su antojo e interés» a estos colectivos.