NUEVA YORK.- Un sismo de magnitud 4,8° en la escala de Richter sacudió esta mañana el área de Nueva York, según reportes preliminares del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés). El epicentro del movimiento, que generó sorpresa en la costa este, se registró en la localidad de Lebanon, en el estado de Nueva Jersey, a unos 80 kilómetros de Manhattan.
Varios aeropuertos de la costa este de Estados Unidos emitieron controles en tierra para detener el tráfico aéreo inmediatamente después. El terremoto sacudió edificios en Manhattan y en todo Nueva York, lo que generó que miles de residentes salieran corriendo a las calles sorprendidos por lo que había sucedido, en una zona donde los temblores no son habituales.
El terremoto se produjo “a las 10.23 (hora local) a 7 kilómetros al nordeste de la estación Whitehouse, Nueva Jersey”, el estado fronterizo de Nueva York, al otro lado del río Hudson. El movimiento telúrico se produjo a una profundidad de 5 kilómetros, según el USGS.
El Departamento de Policía de Nueva York dijo que no tenía informes inmediatos de daños, pero se podían escuchar sirenas por toda la ciudad. Según los informes, el temblor se sintió en ciudades desde Filadelfia hasta Boston.
Varios minutos después del sismo, sonaron alertas en los celulares que aconsejaban a los residentes que probablemente no estuvieran acostumbrados a este tipo de emergencias que permanecieran en sus casas.
“Mi equipo está evaluando los impactos y cualquier daño que pueda haber ocurrido, y actualizaremos al público a lo largo del día”, dijo la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul.
Las réplicas son comunes después de un terremoto y los funcionarios de la ciudad de Nueva York advirtieron a los residentes que estuvieran preparados para ellas. La mayoría de las réplicas son más pequeñas que el terremoto original, pero aún así pueden ser dañinas, según el USGS.
En el centro de Manhattan, el sonido habitual del tráfico se hizo más fuerte cuando los automovilistas tocaron sus bocinas en calles que temblaban. Algunos residentes de Brooklyn escucharon un sonido estruendoso y su edificio tembló. En un edificio de departamentos en el East Village de Manhattan, un residente de California, más propenso a los terremotos, calmó a los nerviosos vecinos, según reportó la agencia AP.
En la sede de las Naciones Unidas, las cámaras que filmaban la reunión del Consejo de Seguridad sobre la crisis humanitaria en Gaza comenzaron a temblar. La representante de la ONG Save the Children, Janti Soeripto, interrumpió un discurso en el que hablaba de hambruna y muertes. “¿Es un terremoto?”, preguntó.
Personas en Baltimore, Filadelfia, Connecticut y otras áreas de la costa este que no están acostumbradas a los terremotos también informaron haber sentido el temblor del suelo.
Las llegadas al Aeropuerto Internacional Newark Liberty, al Aeropuerto La Guardia, al Aeropuerto Internacional John F. Kennedy y al Aeropuerto Teterboro están retenidas debido al terremoto, informó la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés). En esas terminales, los retrasos podrían durar hasta 45 minutos. Los vuelos que llegan también se están retrasando, hasta 30 minutos, en el Aeropuerto Internacional de Baltimore-Washington.
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, dijo que fue informado sobre el temblor y que no se habían reportado daños importantes en la ciudad. “Si bien no tenemos reportes de efectos importantes en estos momentos, seguimos evaluando el impacto”, dijo su vocero, Fabien Levy.
Nathaniel Styer, vocero de las escuelas de la ciudad de Nueva York, dijo en un comunicado que “no hay indicios de que nuestros edificios estuvieran comprometidos”. Aun así, el personal de las instalaciones está realizando inspecciones “rápida y minuciosamente”, añadió.
El jefe de tránsito del Departamento de Policía dijo en X que no se habían reportado daños estructurales dentro del sistema de subte. Agregó que no hubo interrupciones en el servicio a consecuencia del sismo.
Madison Darnell, que estaba en un negocio de ropa femenina en Times Square, dijo que sintió el temblor durante unos 30 segundos. “Se sentía como si pasara un subte”, dijo.
“¡Ay dios mío! Salté y comencé a mirar por las ventanas. ¡Eso fue espantoso!”, dijo Traci Slade, una madre de dos hijos de 50 años y empleada de seguros de software que sintió el terremoto en su casa en Clifton, Nueva Jersey.
Un residente de Bridgewater, en Nueva Jersey, dijo que escuchó un fuerte estallido, “como el trueno más fuerte que jamás hayas escuchado”, seguido de 15 segundos de movimiento, reportó New York Post.
María Pareja, de 44 años, trabaja en una lavandería en Marble Hill, en el Bronx, desde hace siete años. Mientras recibía a los clientes, sintió el terremoto. “Todo empezó a temblar. Dije: ‘¡¿Qué es eso?!’”, señaló. Agregó que había experimentado un terremoto antes, pero que no había sido tan fuerte como el de esta mañana. “Esto fue una verdadera sacudida”, relató. “Sucedió muy rápido, pero fue muy fuerte”.
En un café en el Bajo Manhattan, varios clientes conversaron sobre el sismo, que sacudió al mostrador y los platos y cubiertos. “Noté una puerta temblando en su marco”, relató una empleada, India Hays. “Creí seguro no era posible que haya un sismo aquí”, añadió.
Si bien la mayoría de los terremotos en el nordeste norteamericano pasan desapercibidos, los neoyorquinos han sentido varios a lo largo de los años.
El temblor evocó recuerdos del terremoto del 23 de agosto de 2011 que sacudió a decenas de millones de personas desde Georgia hasta Canadá. Con una magnitud de 5,8°, fue el terremoto que azotó más fuerte la costa este desde la Segunda Guerra Mundial. El epicentro estuvo en Virginia.
Ese terremoto dejó grietas en el Monumento a Washington, impulsó la evacuación de la Casa Blanca y el Capitolio y sacudió a los neoyorquinos tres semanas antes del décimo aniversario de los ataques terroristas del 11 de Septiembre.
Además, un terremoto de magnitud 2,2° sacudió partes de Nueva York y Nueva Jersey en mayo del año pasado, y un sismo de magnitud 3,6° sacudió la ciudad de Adams Center, Nueva York, el mes anterior.
Los temblores más importantes registrados en la ciudad de Nueva York ocurrieron en 1884, dijo Pratt, cuando un terremoto de magnitud 5,2° se registró em Coney Island.
La ciudad de Nueva York añadió disposiciones de seguridad contra terremotos a su código de construcción en 1995, pero la mayoría de los aproximadamente un millón de edificaciones de la ciudad se construyeron antes de esa fecha. Según la ciudad, muchos son consideradas “vulnerables” a los terremotos.
Agencia AP y diario The New York Times
LA NACION