La tan anunciada entrevista que Alberto Fernández le diera al diario El País de España, finalmente fue publicada este lunes y en ella, el expresidente da indicios de su estrategia para desacreditar la denuncia por violencia de género de su ex. Porque, además de negar golpes, luego de que trascendieran las fotos con los hematomas en rostro y brazo de Fabiola Yañez, Fernández avanza en querer instalar la idea de que «alguien incentivó» a la ex primera dama a denunciarlo. Y va más allá al deslizar un interés económico.
En la nota, Fernández hasta se victimiza. “Uno cuando se enoja dice muchas cosas y puede ser ofensivo”, responde sobre si ejerció violencia. “Si eso fuera así, yo también lo padecí”, agrega.
En ese sentido, también apuntó contra Yañez, con quien aseguró haber tenido una relación tumultuosa: “ Nosotros, como toda pareja, tuvimos discusiones. Algunas más vehementes y otras menos vehementes. Necesito saber de qué está hablando. Con ese criterio yo también podría decir lo mismo”.
«Muchas veces tuvimos problemas de otros tipos«, replica cuando le enrostran los chat de Yañez que trascendieron, en los que relataba haber sido golpeada durante tres días. Entonces, el expresidente avanza sobre lo que contrastará, dice, en la Justicia.
«Se me hace muy difícil porque tengo que entrar a explicar otras cosas que directamente se vinculan con su intimidad”, dice y agrega: «Sé en qué situación personal estaba ella y no quiero exponerla públicamente».
Esa sospecha instalada ya había sido adelantada en otra especie de entrevista que Alberto Fernández le diera a Horacio Verbitsky, el periodista que fuera inmunizado con privilegio de orden en el escándalo que trascendió como el vacunatorio VIP, otro escándalo rutilante de la gestión albertista-kirchnerista. Y también fue anticipada por la propia Yañez, quien advirtió que intentarían hacerla pasar por «enferma».
La otra veta de su particular defensa va por la plata. Además de sugerir que hubo «alguien que incentivó» a la denuncia, Alberto Fernández le dijo a El País que “ella (Fabiola) habló de una oportunidad que tenía y no entendía qué ganaba ella si no hacía la denuncia” y que, según el expresidente, Yañez le preguntó a él: “¿Decime qué gano si no hago la denuncia?”.
Leguleyo como abogado al fin, Fernández declaró no tener en claro a qué conversaciones se refirió su ex pareja y primera dama al entregar a la Justicia capturas de chats con el ex presidente en los cuales, entre otras cosas, le habría recriminado haber recibido golpes durante tres días seguidos. «Los chats con Fabiola desaparecieron. No tengo manera de corroborar cómo es toda esa conversación», aclaró Fernández. “No tengo la menor idea de cuándo fue”, remató más adelante, en la entrevista.
A su vez, Fernández hizo hincapié en la repercusión mediática que recobró la denuncia de Yañez: «No conozco la causa y solo sé la causa por su ex abogado [Juan Pablo Fioribello]. He visto las fotografías por los medios, pero no he tenido acceso a la causa aún. Nunca llegaron a mi conocimiento por ningún medio. Lo que voy a hacer es esperar, ir a la justicia y que la justicia resuelva”.
También se refirió a las medidas en materia de género que su administración llevó a cabo, que no se condirían con lo que Yañez denunció haber padecido. «Durante cuatro años fui presidente de este país y promoví las políticas de género, y sé que en casos como este la carga de la prueba se invierte y el hombre es presumido culpable y tiene que probar su inocencia. Yo la voy a probar”, declaró.
«No estoy para alimentar toda la mugre que mediáticamente se está generando. Los recibí a ustedes para decirle a los ojos que no he sido autor de ninguno de esos hechos”, culminó ante los entrevistadores.
DS