Nunca fueron la mayoría en el asfalto o pista a lo largo de la historia, pero ahora las mujeres ya lideran una verdadera revolución en el running. Esto sucede coincidiendo con que este 19 de abril se cumplen 58 años desde que Kathrine Switzer se convirtiera en la primera corredora femenina en un maratón, el de Bostón (EEUU), donde recibió empujones y gritos como «sal de mi carrera y devuélveme el dorsal» de Jock Semple, el codirector de aquel evento.
Aún no se ha alcanzado una paridad total en su práctica, ya que tan solo «un 5,5% de las mujeres que hacen deporte eligen el running, frente al 9,6% de los hombres», tal y como señala David Moscoso, Catedrático de Sociología del Deporte de la Universidad de Córdoba, haciendo referencia a la última Encuesta de Hábitos Deportivos en España de 2024. No obstante, ya no hace falta buscarlas con detenimiento en las calles de las ciudades o pulmones verdes para toparse con ellas, pues cada vez cuenta con más adeptas. El incremento en las cifras desde la pandemia es enorme e imparable de manera generalizada.
Kathrine Switzer corre en el maratón de Boston en1967 (Imagen de archivo) / AP
Un incremento del 44% en España
Lo prueba el reciente informe ‘La Evolución del Running’ de Strava, la aplicación móvil referente que permite registrar, analizar y compartir actividades físicas y que supera los 150 millones de usuarios en más de 190 países del mundo, que apunta un notable crecimiento de las mujeres en el running desde la pandemia: «un 18% a nivel global» y «un 44% en España».
Una tendencia al alza que respalda Agustín Rubio, exdirector de marketing del retail de New Balance Iberia y fundador en 2015 de Tigers Running Club, que concluyó el año 2024 con cerca de 1.500 corredores y el pasado septiembre abrió su tercer centro de atletismo en el número 106 de la Avenida del Manzanares, en Madrid. «En nuestros comienzos, un 20% de todos nuestros socios eran mujeres, pero de forma progresiva el porcentaje ha ido creciendo hasta situarse actualmente por encima del 60%», detalla.
Agustín Rubio, fundador de Tigers Running Club / Instagram
En nuestros comienzos, un 20% de todos nuestros socios eran mujeres, pero de forma progresiva el porcentaje ha ido creciendo hasta situarse actualmente por encima del 60%»
Agustín Rubio
— Fundador de Tigers Running Club
En solitario, o cada vez más en grupo, adelantan a los viandantes por la derecha o izquierda. Un, dos. Derribando con cada paso las barreras que las han separado de su abrazo con el running. «Nunca ha sido una disciplina feminizada. En parte, porque las mujeres siempre han preferido otros deportes de gimnasio relacionados con el cuidado del cuerpo, como el yoga, y porque en su realización, en espacios aislados, podía prevalecer la idea de encontrarse en peligro«, precisa Moscoso.
Dos mujeres corren. / Shutterstock
Sin ir más lejos, el estudio ‘Práctica de running desde una perspectiva de género’, publicado en el año 2022 por el RACC y Zurich Seguros, concluye que el 25% de las mujeres que corren en Madrid han sufrido acoso (el doble que los hombres). Situaciones violentas físicas o verbales frente a las que se enfrentan un 19% de las corredoras en Barcelona.
Moda viral en las redes sociales
A pesar de sus numerosos beneficios para la salud física y mental, como el fortalecimiento muscular o la reducción del estrés, a muchas nunca les resultó una práctica tentadora. Ni tampoco soñaron con seguir los pasos de Marta García, Águeda Marqués o Esther Guerrero. Al menos, hasta ahora, que las redes sociales han elevado al running de un deporte más a un auténtico fenómeno viral.
La alta fiebre de cientos de miles de mujeres por la práctica deportiva ha corrido como la pólvora en Instagram, llevándolas a caer en la última moda de compartir con el resto de usuarios todo tipo de contenido relacionado en imágenes, vídeos breves o stories (publicaciones efímeras que desaparecen después de las 24 horas): los entrenamientos donde se detallan el recorrido, kilómetros y tiempo; sensaciones, consejos, retos, nuevas adquisiciones…
El movimiento también ha cogido envergadura en TikTok, con el éxito de la tendencia ‘Girly Girl’, que aboga por «rodearse de mujeres que sean una inspiración» y está protagonizada por cientos de miles de chicas que se han propuesto idealizar cada uno de los aspectos de su vida filmándola y fotografiándola de forma aesthetic. Ahora, también sus momentos como, generalmente, runners principiantes.
Una locura sembrada por las influencers
Una locura por un deporte, todavía tedioso para muchos, sembrada por las creadoras de contenido (personas con influencia en las redes sociales debido a su gran número de seguidores) que han hecho del running su estilo de vida, incitando a otras mujeres a empezar a correr para disfrutar, superarse a ellas mismas y sentirse mejor.
En el otro lado del Atlántico, los vídeos de Lizzie Ramey, Isabelle Jensennn y Lexil Watts, jóvenes estadounidenses más conocidas como las ‘Utah Runner Girl’, corriendo juntas con la mejor actitud posible y vestidas siempre con ropa deportiva al tono por las montañas del estado, llueva, nieve o salga el sol, se han convertido en la última sensación en TikTok, superando incluso los 7 millones de visualizaciones.
Candela Pérez. / Instagram
Un éxito en las redes sociales que comparten con la española Candela Pérez, alicantina de 32 años, que empezó a correr en el año 2009 por «salud mental» y terminar una carrera de diez kilómetros le ayudó a percatarse de que «cada uno pone sus límites». O, Sara Baceiredo, que a sus 26 primaveras, lleva más de una década «enganchada» al running por su «sentimiento de libertad» desde que decidiera unirse a un nuevo club para jóvenes en su Vitoria natal durante el año de descanso de su práctica deportiva habitual, la natación competitiva . «Ahí entendí que podía hacer deporte también para disfrutar, y desde entonces, el running es mi vía de escape«, cuenta.
«La gente ha ido viendo cómo compatibilizo el deporte con el resto de cosas de mi vida y me emociona que les haya servido de motivación»
Sara Baceiredo
— Influencer
Reconocen que empezaron a plasmar su amor por el running en sus redes sociales sin ninguna pretensión, cuando «todavía no estaba de moda», pero con muchos kilómetros ya a sus espaldas, Candela y Sara ya pueden presumir de haber extendido la práctica entre sus 127 y 624 mil seguidores, respectivamente, en Instagram.
Sara Baceiredo tras la maratón de Londres. / Instagram
«La gente ha ido viendo cómo compatibilizo el deporte con el resto de cosas de mi vida y me emociona que les haya servido de motivación», admite Sara Baceiredo. Y en la misma línea, una gran felicidad inunda a Pérez cuando alguna de sus seguidoras le desvela que empezó a correr hace tres años inspirada por ella y está a punto de completar su primera media maratón. «No hay palabras», añade emocionada.
2024, el año del boom
Ambas creadoras de contenido coinciden en que el boom del running en las redes sociales se produjo en el 2024. Un año en el que la Generación Z, que cuenta con la mayor proporción de mujeres corredoras, ha tomado la delantera como la más activa en este deporte, según el reciente informe ‘La Evolución del Running’ de Strava. «La Gen Z también ha experimentado el mayor aumento en la participación femenina en lo que va de 2025, en comparación con 2019″, precisan desde la plataforma.
Laura Escanes durante la carrera de Zara. / Instagram
«Hasta las propias influencers especializadas en otros ámbitos, como la moda o el lifestyle, han empezado a correr», confiesa Candela Pérez. Entre ellas, las creadoras de contenido Laura Escanes, que se dio a conocer por su relación con Risto Megide, o Gemma Pinto, actual pareja del piloto de MotoGP, Marc Márquez. Ambas debutaron en la primera carrera Zara Athleticz Speed Run, que tuvo lugar en Madrid el pasado mes de noviembre.
El auge de los clubes y eventos ‘solo para chicas’
Que el running está cambiando es ya un secreto a voces. Su público se ha ido feminizando en estos últimos años, sí, pero ya no es solo eso, sino que su práctica se ha trasformado. Ahora, ya no se corre en solitario, sino en comunidad, por el triunfo de la tendencia del ‘social running’, que consiste en correr en grupo para socializar con otras personas. Y, sí, también ellas, en clubes e iniciativas con la etiqueta ‘solo para chicas’.
«Propusimos crear un grupo específico enfocado en acompañar y dar confianza a chicas que están comenzando a correr, ofreciéndoles un entorno seguro y el acompañamiento de un equipo profesional»
Alba
— Entrenadora del grupo de Adidas ‘Girls’
La marca de ropa Oysho (grupo Inditex) reúne en su tienda de la calle Hermosilla de Madrid cada lunes a las 19.30 horas a todas las mujeres que se inscriben a través de su aplicación móvil a sus entrenamientos gratuitos. Y Adidas toma El Retiro (a partir de la puerta del Niño Jesús) los martes a la misma hora con su grupo ‘Woman’s Run’, surgido a principios de 2024 en Madrid.
Alba Pellicer con otras entrenadoras del grupo Woman’s Run de Adidas / Instagram
«Nos dimos cuenta de que muchas chicas no se animaban a venir a entrenar por miedo a no poder seguir el ritmo. Por eso, propusimos crear un grupo específico enfocado en acompañar y dar confianza a chicas que están comenzando a correr, ofreciéndoles un entorno seguro y el acompañamiento de un equipo profesional», explica Alba Pellicer, una de las entrenadoras.
Mujeres integrantes de ‘Ginger Running Club’ / Instagram
Junto a estas iniciativas, ha surgido otra independiente expresamente para mujeres, ‘Ginger Running Club’, pionera y única hasta el momento, fundada en noviembre de 2022 por la influencer Candela Pérez, tras su propia experiencia: «No me identificaba con ningún club existente, y en un momento en el que a todo el mundo le gusta formar parte de algo, pensé que muchas chicas podrían estar en las mismas», precisa.
Con ya 5 clubs en diferentes ciudades de España (Madrid, Barcelona, Bilbao, Valencia y Málaga), proponen un plan de entrenamientos en función del nivel de cada una que puede ir completando en solitario y fijan un día a la semana para correr todas juntas. «El ambiente es muy sano, cuando no estás teniendo un buen día, las demás tiran de ti, y cuando otras no lo están teniendo, tú tiras de ellas. Es cero competitivo», cuenta sonriente.
Evento de The Ginger Club / The Ginger Club
Pero más allá de correr, que sigue siendo y será el centro, los eventos para chicas se han popularizado, a la par que llenan sus agendas de diario y fin de semana. Desde tomar un café en el local de moda después de entrenar o cerrar el easy run (tipo de entrenamiento de que consiste en correr a un ritmo suave) con una cena con tus compañeras de tirada larga, hasta viajar a Mallorca para disfrutar de un retiro con sesiones de yoga o nutrición y salidas running, como el que llevará a cabo Candela Pérez con ‘Ginger Running Club’ el próximo mes de mayo.
Los efectos
El aumento de la presencia de las mujeres en el running ha provocado que las cifras de las inscripciones femeninas en los maratones o medias se hayan disparado. En pruebas como la Maratón de Valencia del 2024 se registró un aumento del 2% de corredoras, que fueron un 21% de todos los participantes. Y en el Zurich Rock ‘n’ Roll Running Series Madrid de este año, que se celebrará el próximo 27 de abril, las mujeres alcanzan el 40% de la participación en la media maratón.
Más allá de eso, la revolución liderada por mujeres en el running también ha influido a que la pista de atletismo se haya convertido en una verdadera pasarela de moda, favoreciendo así de forma directa a que se cumpla el alza del 7,2% en la moda deportiva ya anticipado por Euromonitor, la empresa líder mundial en análisis de datos e investigación de mercados, para el 2025. Quién se lo iba a decir a Kathrine Switzer aquel 19 de abril de 1967.