Se jactaba de que lo iba a ganar todo y termina la temporada sin títulos y coleccionando ridículos. Este Inter de Milán es hoy un equipo roto, física, táctica y moralmente, que nada tiene que ver con aquel que eliminó al Barça en las semifinales de la Champions gracias a las ayudas arbitrales en el Giuseppe Meazza.
Y si alguien creía que los nerazzurri habían tocado fondo con el 5-0 que el PSG de Luis Enrique les metió en la final de Múnich, estaba equivocado. Aún no han llegado a lo más hondo del pozo. Este lunes, en el horno de Charlotte, protagonizaron un nuevo ridículo histórico: cayeron (0-2) ante el Fluminense en los octavos de final del Mundial de Clubes.
El conjunto que entrena el carismático Renato Gaúcho, que era el ‘patito feo’ de los brasileños en este torneo, entró en la galería de verdugos del Inter en este 2025: el Milan los dejó sin Supercopa y Coppa, el Napoli les ganó el mano a mano liguero y el PSG los humilló como nunca antes se había visto en una final de Champions.
Germán Cano, providencial
El Flu estaba sobreaviso a tenor de lo ocurrido con sus vecinos del Flamengo, que habían sido liquidados por el Bayern Múnich, que les endosó dos goles en los primeros nueve minutos, lo que les arruinó cualquier posibilidad de clasificación (al final cayeron por 4-2).
Para empezar, Renato Gaúcho, más precavido que Filipe Luís, alineó tres centrales, con Thiago Silva volviendo a hacer de kaiser y guía espiritual tras descansar en el último partido de la primera fase. Y su equipo salió enchufado, todo lo contrario que el Inter.
Los de Chivu, muy desconectados y despistados, jugaban de forma imprecisa y perdieron balones a pares en zonas temerarias. Y uno de ellos llegó a John Arias en la punta derecha, lo que es peligro seguro. Centró el colombiano y la pelota, tras un mínimo desvío, botó en medio de los centrales nerazzurri, que se quedaron paralizados, lo que aprovechó Germán Cano para marcar de cabeza el 0-1.
El Flu no era el Fla. Y, a los tres minutos, obtenía un precioso botín, que se dedicó a defender durante muchos minutos, con los aciertos del veteranísimo Fábio y una defensa cerrada, intentando cazar algún contragolpe.
El Inter no se encontraba. Desarrollaba su juego a un ritmo cansino, con las líneas demasiado separadas y sin punch arriba. El partido casi se les escapa por sus excesos defensivos. Iban al límite, con la permisividad arbitral y del VAR, porque tanto Asllani como Dimarco podrían haber visto perfectamente la roja directa ya en el primer tiempo.
Los cariocas fueron sobreviviendo sin demasiados sustos, hasta el último tercio del encuentro. Fue entonces cuando, por decisión propia, dieron un paso atrás y se agazaparon, seguros de su fortaleza defensiva, con un cerrojazo que tenía un dibujo de 5-4-1, con John Arias descolgado arriba.
Lautaro, hasta entonces inédito, finalizó por primera vez en todo el encuentro en el minuto 79, lo que da buena cuenta de los déficits ofensivos del Inter. El Toro tuvo acto seguido otra, que salvó Fábio… y la tercera la estampó en el palo (min. 82). El partido estaba en sus botas.
No llegó el tanto del argentino. Y, en el descuento, en un episodío de valentía, el Flu marcó un golazo improbable con un anotador inesperado, Hércules.
Se certificaba la defunción del Inter, que ni le sirve de consuelo haber hecho dos palos. Y el Tricolor carioca, que ya había empatado con el Borussia Dortmund en su estreno, se cuela en los cuartos de final, donde compartirá con el Palmeiras la representación brasileña y de la Conmebol. La suya es una hazaña.
Ficha técnica: Inter de Milán – Fluminense (0-2)
Inter de Milán: Sommer; Darmian, De Vrij; Bastoni (Carlos Augusto, 71′); Dumfries (Luis Henrique, 53′), Barella, Asllani (Sucic, 53′), Mkhitaryan (Carboni, 53′), Dimarco; Thuram (Espósito, 65′) y Lautaro Martínez.
Fluminense: Fabio, Samuel Xavier, Ignacio, Thiago Silva, Freytes, René; Facundo Bernal (Thiago Santos, 85′), Martinelli (Hércules, 60′), Notato (Lima, 60′); John Arias y Germán Cano (Everaldo, 65′).
Árbitro: Iván Barton (El Salvador). Amonestó a Asllani (9′), Bastoni (37′) / Germán Cano (16′), Freytes (26′), René (36′), el técnico Renato Gaucho (45+3), Thiago Santos (85′).
Goles: 0-1 Germán Cano min 3; 0-2 Hércules min 90+3.
Incidencias: Estadio Bank of America en Charlotte (EE.UU.).