El Ministerio de Defensa, de Jorge Taiana, llevará adelante la investigación de la polémica compra, según el jefe de Gabinete informó ante el Congreso.
Lo dijo el jefe de Gabinete Agustín Rossi en su informe ante la Cámara de Diputados, el martes último. El ministro Jorge Taiana quiere investigar la compra a Francia de unos aviones caza adquiridos por el gobierno de Mauricio Macri en 2018, pero que nunca volaron. Llegaron así y el Gobierno actual no los puso en marcha.
Se trata de unos cinco Dassault Super Etendard Modernisé, que están sin volar desde que llegaron al país en 2019 en unos hangares de la base Espora, en Bahía Blanca.
«El Ministerio de Defensa cree necesario señalar que la adquisición de las aeronaves Dassault Super Étendard Modernisé es objeto de investigación por los organismos pertinentes a los efectos de determinar la existencia de irregularidades, desvíos, responsabilidades y posible perjuicio fiscal, motivo por el cual todo lo relativo a la incorporación y situación actual se encuentra bajo actuaciones reservadas hasta tanto se resuelvan dichas investigaciones», dijo Rossi el martes cuando debió contestar a las preguntas que le hizo la oposición en el Congreso.
Rossi, que también fue ministro de Defensa de Alberto Fernández antes de asumir Taiana, sostuvo que se ponía a «conocimiento» que «el sistema de armas consultado (de los Super Etendard) ya había sido desprogramado por las Fuerzas Armadas francesas con anterioridad a su adquisición por nuestro país», es decir que los aviones llegaron sin armamento.
Y señaló que «surge del Arreglo Técnico suscripto para su compra en el año 2017 (aprobado en 2018) que las 5 aeronaves Super Etendard Modernizados que se estaban adquiriendo no se encontraban en condiciones de vuelo». Reconoció: la situación «no se modificó desde entonces».
Finalmente, aseguró que el Gobierno sigue «efectuando esfuerzos significativos a los efectos de conseguir proveedores tanto nacionales como extranjeros que proporcionen soluciones integrales para su puesta en operatividad».
Fuerte polémica
En su momento, la publicación en Clarín de la historia de cinco cazabombarderos Super Étendard Modernisé comprados a Francia en 2018, que nunca volaron, y que no se pueden recuperar por falta de repuestos, según dijo el ministro de Defensa, Jorge Taiana, alteró los ánimos de una polémica que ya estaba abierta.
De hecho, tras las palabras de Taiana y la publicación de las mismas, la Armada distribuyó una gacetilla que señalaba que “las aeronaves correspondientes al sistema de armas Super Étendard Modernisé (SEM) incorporadas en mayo de 2019 (es la fecha en que llegaron tras atrasarse los pagos y la entrega) al Comando de la Aviación Naval y asignados a la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Caza y Ataque, no han sido desprogramadas por parte del Ministerio de Defensa”.
La comunicación de la Armada también dice que desde su arribo, las aeronaves son “sometidas a un plan de inspecciones y mantenimiento” por parte del personal del Arsenal Aeronaval Comandante Espora y de la Escuadrilla a la que pertenecen, “con normalidad”.
Que también se capacita a sus pilotos, utilizando el simulador de vuelo (estos aviones no volaron nunca en la Argentina) y que «continúan las gestiones y consultas técnicas con empresas extranjeras y organismos nacionales para analizar las alternativas de desarrollos nacionales que sustituyan los elementos de seguridad de las aeronaves vetados por el gobierno británico».
Los Super Etendard Modernisé son una versión modernizada de los que actuaron en la guerra de Malvinas, dos de los cuales participaron del ataque el HMS Sheffield, del Reino Unido, al que le dispararon sus misiles Exocet el 4 de mayo de 1982. Seis días después el buque de la flota británica se hundía.
Los ánimos contra la desidia del Estado que refleja la historia de los Super Étendard resurgió cuando periodistas de la revista Pucará Defensa, le preguntaron al ministro Taiana sobre la desdicha de los mismos.
Estos estuvieron pensados para que vigilaran los cielos durante la cumbre del G20 de 2018. Luego para patrullar el mar, aunque fueran aviones de guerra, de ataque, y como llegaron tarde y debido a su estado -no tienen asiento eyectable de la Martin Baker, que es británico-, se los pensó para que los pilotos navales, que están sin aviones de este tipo, no perdieran sus horas de vuelo y su entrenamiento.
“Los teníamos previsto recuperar y fui a hablar con el ministro de Defensa (de Francia), quien me dijo que no se pueden recuperar, por dos razones: por los asientos, que los británicos no cedían, y por una serie de piezas del Super Étendard Modernisé que están desprogramados, y por lo tanto ellos, que en principio habían visto la posibilidad de hacer las piezas, dicen que no pueden hacerlos”, lanzó Taiana a Pucará el pasado 17 de marzo.
Los aviones chinos
Rossi a su vez hizo una alusión a las negociaciones con China sobre la oferta para que se les compre una flota de aviones JF -17 Thunder. Pero lejos de responder con claridad, el jefe de los ministros dijo:
«El Ministerio de Defensa informa que se están evaluando diversas posibilidades. El documento que avala la adquisición es el BAPIN N° 107.799 “Incorporación de 36 aviones de Caza Multirol para recuperar la capacidad de Operaciones Aeroespaciales en la VI Brigada Aérea – Tandil – Provincia de Buenos Aires”. Pero dejó en claro que no hay definiciones.
Tal como reflejaba un artículo del sitio Zona Militar, el ministerio de Defensa sigue analizando las dos propuestas con más posibilidades son la de Estados Unidos por F-16 provenientes de la Real Fuerza Aérea de Dinamarca; y la de la República Popular China por FC-1 Xianlong (también denominados por Pakistán como JF-17 Thunder).»