En la previa al inicio del debate del nuevo proyecto de ley de bases, el kirchnerismo y diputados de otros bloques buscarán reactivar esta semana la discusión por el mega DNU 70/23, ya rechazado en el Senado y con el tratamiento frenado en la Cámara baja. Los legisladores contrarios al decreto armarán una jornada con exposiciones de constitucionalistas, con el propósito de que funcione como un paso previo para empujar una sesión en el recinto.
El DNU que desregula la economía y deroga más de 80 leyes fue declarado inválido por el Senado el 14 de marzo. La amplitud de la votación -42 en contra, 25 a favor y cuatro abstenciones- configuró el escenario para que el Congreso quedara cerca de voltear por primera vez un decreto a un presidente en ejercicio.
Para que eso suceda también tendría que rechazarlo Diputados, aunque el panorama no se trasladó de inmediato y de manera lineal de una Cámara a la otra. La Casa Rosada puso en marcha negociaciones con los gobernadores y también convocó a referentes parlamentarios de la oposición llamada dialoguista, que al no acelerar con el tratamiento posibilitaron que el oficialismo ganara tiempo.
Ahora Javier Milei procurará que Diputados retome el debate por la fallida ley ómnibus, esta vez más acotada. Como contó Clarín, desde La Libertad Avanza adelantaron que el proyecto ingresará entre jueves y viernes -antes circulará un borrador pulido entre los mandatarios provinciales y legisladores-, para comenzar a tratarse en comisión y en lo posible llegar al recinto este mes.
El kirchnerismo decidió no avanzar con el intento para derogar el DNU hasta reunir los 129 votos necesarios para garantizar el quórum y el rechazo. Con la convocatoria a constitucionalistas -será este martes por la tarde, en el anexo-, Unión por la Patria articulará una primera acción en conjunto con el Frente de Izquierda y el socialismo para mantener el tema en la agenda y latente, hasta alcanzar el número para ir al recinto.
De la actividad podrían participar también diputados radicales del ala más crítica del partido, referenciados en Facundo Manes y Martín Lousteau, y otros que responden a gobernadores distanciados de la Casa Rosada, como el rionegrino Alberto Weretilneck y el santacruceño Claudio Vidal. Será también, de algún modo, una actividad para testear el clima sobre el DNU.
Desde Unión por la Patria, Carolina Gaillard, Leopoldo Moreau, Eduardo Valdés, Vanesa Siley y Silvana Ginocchio preparan la jornada con los socialistas Esteban Paulón y Mónica Fein, Myriam Bregman y Romina del Pla del Frente de Izquierda, más otros diputados que evalúan participar como el radical Pablo Juliano.
Entre los invitados a exponer figuran desde Eduardo Barcesat y Rafael Bielsa a Andrés Gil Domínguez, María Laura Clérico y el cordobés Antonio Hernández, constituyente por la UCR y de perfil antikirchnerista, con el objetivo de mostrar un listado de oradores con amplitud ideológica. “De todos los palos”, remarcaron. También hablarán Gustavo Ferreyra, Daniel Erbetta, Miguel Rodríguez Villafañe, Mariela Puga, Beatriz Rajland y Pedro Caminos, entre otros.
Una jornada para empujar el tratamiento
“La idea es que hagan un análisis, desde la trayectoria académica en derecho constitucional, sobre la validez del DNU”, aseguraron sobre el armado de la jornada, que intentarán que implique un envión para llevar el decreto al recinto de la Cámara. Los opositores pondrán en marcha la actividad por afuera de la bicameral del área, presidida por el oficialista Juan Carlos Pagotto. Buscarán ir directo a una sesión especial sin pasar por la comisión, como sucedió en el Senado.
“Consideramos que es fundamental que antes de tratarlo en el recinto la mayor parte de los diputados tenga la opinión de los especialistas que se han manifestado públicamente en contra”, dijo Gaillard a Clarín. “Entendemos que resulta necesario el tratamiento urgente, pero dado que algunos bloques aún dudan entendemos que esto podría contribuir para rechazar un DNU que a todas luces es inconstitucional”, completó la diputada de Unión por la Patria.
“El DNU está produciendo efectos terriblemente negativos para la sociedad, en materia de aumentos tarifarios y desregulación absoluta de precios. Hasta Caputo reconoce que a algunos se les va la mano”, agregó Moreau.
“La idea es tener una presencia plural y poner el tema otra vez en debate, para . que no salga de la agenda ahora que vuelve la ley de bases. Hay una dinámica del Gobierno de frizar el Congreso y habilitarlo para lo que le interesa. Para nosotros esto es importante porque el DNU sigue vigente”, advirtió el socialista Paulón.
“Es un sinsentido de que con el silencio de una sola cámara continúe vigente un decreto que regula tantas materias. El tratamiento del DNU va de la mano con la discusión del régimen que los regula”, planteó el radical Pablo Juliano, que presentó un proyecto para que los decretos deban ser avalados por las dos Cámaras dentro de los 60 días para mantener su validez.
Como publicó este diario, el kirchnerismo había puesto el freno en la estrategia para derogar el decreto. Sin los votos, prefirió esperar y por el momento no pedir una sesión especial. Según los cálculos entre los opositores no estarían tan lejos de los 129, y mantienen la expectativa de que con las idas y venidas en las negociaciones de la Casa Rosada con los gobernadores y los recortes de recursos a las provincias junten el número para derogar el DNU.